Donald Trump una vez más ha torpedeado la relación de los Estados Unidos con México, su tercer socio comercial más grande, su vecino más cercano y, en realidad, un aliado, al anunciar su decisión de imponer un arancel del 5 por ciento a todos los productos mexicanos si México no detiene a los migrantes y refugiados centroamericanos que se dirigen a Estados Unidos.
